El cambio climático trae veranos más tórridos y episodios de lluvias puntuales e intensas en la Comunitat Valenciana. Ya lo comentábamos en el artículo Clima y Turismo con el catedrático de la Universidad de Alicante, Jorge Olcina.
Pero ¿cómo se están adaptando los servicios turísticos a las nuevas condiciones climatológicas? Os contamos 5 cambios que ya están viviendo diferentes empresarios de alojamiento y experiencias turísticas.
1. CAMBIAN LOS HORARIOS: MÁS ACTIVIDAD NOCTURNA EN VERANO
“Hemos notado cambios por la climatología pero, de momento, de manera muy sutil” afirma Romina Montero, desde SH Hoteles, “nuestro cliente habitual viene buscando clima cálido, la ocupación este verano es alta, superior a la de 2019”. Ahora bien, la cadena sí ha tenido que adaptar horarios y apostar más por el servicio nocturno en terrazas, “tratamos de mantenerlas abiertas siempre que se puede e incluso, vamos a ampliar la terraza de uno de nuestros hoteles para adaptar el espacio a la demanda del cliente”
Las empresas de experiencias han trasladado sus actividades a la tarde y la noche. “Cambiamos a partir de las 19h las visitas de la mañana. He tenido gente que casi se desmaya por las mañanas cuando las visitas al campo eran a las 12h” dice Juan Domingo Tárrega, gerente de la Bodega bioclimática Mas de Rander. “Es curioso porque hace años la gente venía menos a la bodega en verano, centraba sus vacaciones en disfrutar el sol y playa. Ahora las diversifican más, quieren hacer otras actividades, por eso es mejor ofrecer las visitas por la tarde-noche”.
También los festivales de música se están adaptando. El Rototom que se realiza en pleno mes de agosto no se plantea cambiar de fecha pero el grueso de su actividad es a partir de las 19h.
2. CAMBIA LA TEMPORADA ALTA
Juan Domingo también cree que este clima hace que “la temporada alta para el enoturismo acabe después. Antes, a partir del 15 de noviembre, la gente estaba ya en modo Navidad, ahora tenemos visitas hasta el 20 de diciembre”.
En Itinerantur, empresa de turismo de naturaleza, creen que el cambio en nuestro clima no ha influido mucho en su cliente familiar pero sí en el turista senior internacional, que reciben fuera de verano. “Tienen más oportunidades porque hay mejores condiciones y menos lluvias” apunta Belén Salvador.
Sin embargo, para Virgilio Beltrán, guía de turismo ornitológico y gerente de la agencia Numenius, la temporada alta empieza más tarde ahora. “Antes septiembre era un mes bueno para salir al campo a la observación de aves. Ahora la Albufera ya no se puede visitar desde julio hasta octubre por ejemplo”
3. MÁS INCERTIDUMBRE Y VARIABILIDAD DE PRECIOS
“Hoy en día no se sabe ni qué va a hacer el tiempo a 2 horas vista. La inestabilidad climatológica provoca inestabilidad en las reservas, un aumento de la última hora y más variabilidad en los precios” asegura el director del camping Armaniello de Benidorm.
“No afecta tanto a los viajes largos del turismo internacional pero sí al nacional. Se nota bastante últimamente. Antes la temporada alta estaba muy definida y los precios altos vinculados a ella también. Ahora los precios son dinámicos en base al tiempo” explica Delgado que apunta también todo lo que ello conlleva en cuanto a la operativa, el mantenimiento, los horarios del personal “que no son fáciles de variar según la legislación”.
4. MÁS INVERSIÓN EN SEGURIDAD, CONFORT TÉRMICO Y VIGILANCIA AMBIENTAL DIRECTA
“Hace unos días se esperaban lluvias de 30 litros por metro cuadrado en Benicàssim y al final cayeron 300” dice Fiachra, “las previsiones son inciertas. Nosotros tenemos nuestra propia estación meteorológica en el recinto del Festival Rototom para tener información directa, además de estar en contacto con todos los servicios de emergencias”.
El clima es un factor determinante en experiencias al aire libre y el Rototom dedica anualmente más de 300.000 euros a mejorar la sostenibilidad, accesibilidad y seguridad del festival. “Hemos reforzado estructuras, sustituido bambú por andamios y hormigón, y nuestros planes de emergencia y evacuación han funcionado perfectamente cuando ha sido necesario ante las tormentas. El Rototom nació en el norte de Italia, las inclemencias del tiempo son parte de la historia del Festival. Estamos acostumbrados a adaptarnos” asegura Fiachra Mc Donagh.
También el comportamiento de las aves es cada vez menos previsible a consecuencia del cambio climático. “Cambia la llegada de las especies, los ciclos de reproducción, etc. Estamos obligados a estar constantemente en el campo observando, cambiar itinerarios y relocalizar. No somos como los guías culturales que tienen el patrimonio siempre en el mismo sitio” dice Virgilio Beltrán.
“Desde siempre la agricultura se ha adaptado al clima. Ha variado la época de poda y recolección, hemos cambiado variedades. Ahora el turismo también. Hemos cambiado horarios, hemos puesto carpas. Tenemos olivos de 500 y 600 años y los podamos de forma que den más sombra. En nuestra bodega, al estar bajo tierra, aprovechamos el efecto cueva para garantizar el fresco en verano y el calor en invierno” explica el gerente de Mas de Rander.
5. MÁS FLEXIBILIDAD EN LA POLÍTICA DE CANCELACIÓN
“Como las previsiones son inciertas, el tiempo va loco, nuestra previsión de actividades para grupos y fines de semana es muy flexible. Hasta el día de antes se puede reorganizar el tour y no incluimos penalización por causas meteorológicas” explica Belén desde Itinerantur.
Juan Delgado dice que en su camping también rebajan las condiciones de cancelación en determinadas épocas del año aunque reconoce que Benidorm es un mercado muy competitivo: “nos solemos adaptar unos a otros, se suele flexibilizar la política pero también es verdad que esto provoca mayor ratio de cancelaciones. Es la pescadilla que se muerde la cola”.
En el Mas de Rander ofrecen cambio o cancelación hasta 48 horas o 1 semana antes, dependiendo de si la visita incluye comida o no: “es difícil flexibilizar más porque hemos de comprar las provisiones con antelación ya que todo lo que ofrecemos es producto de proximidad, pero si hay ola de calor somos nosotros mismos los que llamamos al cliente y ofrecemos cambiar las fechas”, dice Tárrega.
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