El nuevo decreto de municipio turístico de enero de 2020 determina unas cifras concretas de población turística en relación a la población residente para designar un destino como municipio turístico. Pero ¿qué datos son los más fiables, o mejor dicho, cómo saber cuáles son los más reales si muchos turistas no pasan por las oficinas Tourist Info o no pernoctan en hoteles o se desplazan de forma particular o no descargan la app local…?
Alcoy se planteó esta cuestión cuando se dio cuenta que, según sus registros, el municipio no cumplía el criterio de población turística exigido en el nuevo Estatuto. Necesitaban cumplirlo, necesitaban contar mejor y ahí surgió la idea del Alcoy Tourist Lab, proyecto reconocido este año con el Premio Innovación Tourist Info.
“Este proyecto nace de la necesidad que tenemos en el Ayuntamiento de Alcoy de poder obtener datos de la afluencia en los puntos de interés del destino a raíz de la publicación del nuevo decreto que regula el municipio turístico” nos cuenta la técnica de turismo de Alcoy. Ahora bien, Paola Pons, reconoce también que en muchas otras ocasiones necesitaban saber las personas que habían visitado el destino por eventos o en lugares concretos: Moros y Cristianos, la Cabalgata de Reyes, visitas a los parques naturales, a la Vía Verde, etc y no tenían datos fiables: “la afluencia a las Tourist Info nos da idea sobre la tendencia y evolución del dato pero no responde a la realidad porque cada vez existe más gente que no pasa por la oficina porque se informa previamente por Internet”.
DATOS SIN CONSENTIMIENTO PERO CON GARANTÍA DE PRIVACIDAD
Pero ¿cómo tener datos fiables sin depender de los propios turistas, de que visiten la oficina, de que descarguen una app, de que se alojen en el municipio, de que se conecten a una wifi pública…? Todo ello requiere que el turista dé su consentimiento y “nosotros no queríamos que el turista tuviera que hacer nada pero que su visita quedara registrada y en todo caso que se cumpliera el reglamento europeo de protección de datos. De hecho, antes se realizó una evaluación de impacto de protección de datos a través de la Agencia Española de Protección de Datos y el resultado fue aceptable” cuenta Paola.
Estos datos se pueden comprar a través de las compañías telefónicas que pueden contabilizar y rastrear dispositivos móviles o a través de los movimientos de tarjetas de crédito pero Alcoy tampoco deseaba depender ni de banca ni de operadoras porque comprar estos datos suponía una inversión demasiado costosa.
El reto tecnológico era importante pero vieron la oportunidad en una convocatoria de innovación que lanzó en 2020 la Agencia Valenciana de la Innovación y rápidamente se pusieron manos a la obra. Hablaron con la Universidad de Alicante y la Escuela Politécnica de Alcoy y les plantearon la idea. Las dos instituciones se involucraron en el proyecto, consiguieron también el apoyo de Invat·tur, el Instituto Valenciano de Tecnologías Turísticas, y lo presentaron a la Agencia Valenciana de la Innovación con éxito. Consiguieron una ayuda de casi 49.000 euros (el 70% del proyecto, presupuestado en cerca de 70.000 euros),del programa de ayudas de Acciones Complementarias de Impulso y Fortalecimiento de la Innovación.
REGISTRAR LAS WIFIS FAVORITAS
Pero ¿ cómo iban a conseguir tal reto? Pues la clave han sido las wifis favoritas a las que se conectan automáticamente los dispositivos móviles. Lo que se hace realmente es registrar los SSID’s (el Service Set Identifier, un código que comparten los dispositivos que forman parte de una red inalámbrica) y eliminar automáticamente la conexión de los datos con cualquier identificación personal.
Ahora mismo, existen 10 dispositivos, llamados hopus, en diferentes lugares de Alcoy ( Vía Verde, Font Roja, El Molinar, Plaza España, La Glorieta, Cantina El Preventorio, Plaça de Dins, oficina Tourist Info) que captan las 5 direcciones SSID’s o wifi favoritas de cada teléfono móvil.
“Lo primero que hicimos fue rastrear todos los routers que existen en los domicilios de Alcoy, más de 30.000, y registrarlos” cuenta Paola que recuerda que este rastreo se hizo de una forma curiosa: “Colocamos un dispositivo en el camión de la basura que recorre todo el municipio y aún así, en las zonas en las que no llegaba, mis compañeros del Departamento de Innovación o yo misma lo colocábamos en el bolso o en la mochila y caminábamos por el resto de calles para realizar el registro.”
Una vez conocidos los SSID’s de las redes wifi que corresponden a domicilios de Alcoy, descartamos las redes wifi públicas del municipio, así como las de hoteles, bares y restaurantes o lugares de frecuentación turística, y así, si alguna de ellas aparece entre las registradas por un hopu, se considera que ese teléfono móvil corresponde a un residente, si no coinciden, corresponde a un visitante. En realidad, las Universidades están diseñando un algoritmo mucho más complejo porque tendrá en cuenta también otros parámetros como la frecuencia, el tiempo de permanencia, itinerario, etc para depurar también posibles personas que acuden al municipio a trabajar, por ejemplo.
“Todo se está pilotando en fase de prueba. Ahora estamos discriminando básicamente cuáles son ciudadanos de Alcoy y cuáles no, y luego de ellos, cuáles son excursionistas y cuáles turistas” explica Paola.
LA FIABILIDAD DE LOS DATOS
Tanto la tecnología, el hardware y el software, como el algoritmo están instalados en fase piloto. “Hemos tenido que comprobar incluso si el hopus, que está instalado al aire libre, tenía resistencia, durabilidad y alcance suficiente” cuenta Paola, “todo es nuevo, nunca se ha probado antes, actualmente no existe tecnología así”.
El principal reto ahora es asegurar que los datos que se recogen son realmente fiables y que el algoritmo da como resultado la población turística real. Para ello se contrastará la información con los datos de otras fuentes: pernoctaciones hoteleras, visitas a los museos, visitas al Parque Natural, a la oficina Tourist Info… “Se ha instalado un hopus en la oficina de turismo y se contrasta la información que recoge con las visitas que registra la Tourist Info donde donde a través de una encuesta preguntamos si el usuario dispone de móvil con wifi abierto o no” explica Paola.
TECNOLOGÍA PROPIA EXPORTABLE
Desde 2020, la técnica de turismo trabaja con el técnico de innovación del Ayuntamiento en este proyecto junto a los equipos de las Universidades que siguen desarrollando el Alcoy Tourist Lab gracias a la financiación obtenida de la AVI. Ahora bien, según Paola, esto es un proyecto a largo plazo, incluido en la estrategia DTI y Smart City de Alcoy y ahora deben contemplar como seguir obteniendo financiación para poder seguir desarrollándolo. “El ayuntamiento quiere ser el impulsor de la innovación, nos planteamos participar en algún proceso de compra pública de innovación con el fin de que, a largo plazo, la propiedad de esta innovación tecnológica suponga incluso beneficios por royalties para el consistorio” apunta Pons.
De hecho, el Alcoy Tourist Lab es un proyecto vinculado al Plan de Destino Turístico Inteligente de la ciudad, redactado en el marco de la Oficina Técnica DTI-CV del Instituto Valenciano de Tecnologías Turísticas (Invat·tur) y pretende ser una herramienta flexible, dinámica, cuyas acciones se puedan actualizar dependiendo de las necesidades de cada momento. Alcoy, además, forma parte de la Red DTI-CV en el nivel 3 y es candidata a la Red Nacional de Destinos Turísticos Inteligentes de Segittur.
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